El torero Cayetano Rivera, corneado por el segundo toro de la corrida de ayer en Zaragoza, al que cortó las dos orejas, fue intervenido en la enfermería de la plaza de una cornada de tres trayectorias en el muslo izquierdo, de pronóstico grave.

El parte médico desveló ayer que el diestro sufre una cornada "a nivel de la cara interna del tercio superior del muslo izquierdo con orificio de entrada de seis centímetros y tres trayectorias".

"Una superior que llega hasta el pubis, otra posterior de 10 centímetros que desgarra las fibras de los músculos aductores y otra inferior de 20 centímetros que dislacera las fibras del cuádriceps; profusa hemorragia a expensas de vasos musculares. Pronóstico grave".

Tras reponerse aparentemente del percance, y con la pierna y el rostro cubiertos de sangre, Cayetano siguió toreando al astado, al que estaba cuajando una buena faena, e incluso llegó a entrarle a matar, cobrando una estocada que fue suficiente para cortarle las dos orejas, concedidas cuando el torero estaba en la enfermería.