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La tecnología se alía con la accesibilidad

Díaz de la Rosa analiza los avances en el ámbito laboral de las personas con discapacidad visual

Luis Fernando Díaz de la Rosa ante la sede territorial de la ONCE. JUAN CASTRO

"Por fortuna, la ONCE ha hecho posible que la adaptación al puesto de trabajo sea total. Contamos con ordenadores y otras tecnologías que nos dan acceso a toda la información necesaria para poder hacer una gestión de manera normalizada. Hoy podemos decir que hay pocas barreras en el trabajo, ya que la ONCE proporciona todo lo necesario para la adaptación al puesto de trabajo".

Así lo afirmó ayer Luis Fernando Díaz de la Rosa, jefe del Departamento de Juegos de la Delegación Territorial de Canarias de la ONCE en Las Palmas de Gran Canaria, quien analizó los avances experimentados en los últimos años en la eliminación de barreras, gracias a las nuevas tecnologías.

"Cuando empecé a trabajar hace más de 25 años era muy complicado, el acceso a la información era en braille, a través de cintas caseras gravadas o de alguien que te leyera ciertos documentos de trabajo, y el acceso a los ordenadores era prácticamente nulo".

Díaz de la Rosa apuntó que las primeras adaptaciones con sintetizador de voz aparecieron a finales de los 90, y que actualmente han evolucionado a una lectura automática de la pantalla del ordenador. "Te permite acceder desde internet a cualquier base de datos dentro de la ONCE, y puedes leer sin problema cualquier documento de cualquier tipo. El avance ha sido muy importante, siempre hay cosas que se pueden mejorar, pero son detalles".

Sin embargo, dicho progreso no se ha dado en todos los ámbitos. Las barreras arquitectónicas siguen existiendo en las ciudades, y también se ha avanzado poco en conciencia social, de ahí la importancia de seguir celebrando el Día Internacional de la Vista, según destacó Díaz de la Rosa.

"Hay muchos días especiales, como el de la mujer o la infancia, que desafortunadamente no viene mal que existan para llamarnos a todos a la reflexión sobre la situación en la que estamos y lo que nos hace falta. Contribuye a hacer un poco más de presión hacia la gente que tiene que tomar decisiones, y a incrementar la concienciación en general de los ciudadanos. Aquí vivimos todos y todos necesitamos una accesibilidad, para elevar la calidad de nuestras vidas", apuntó.

Respecto a las barreras arquitectónicas, el jefe de Juegos de la ONCE en Canarias indicó que en todas las ciudades siguen existiendo muchos problemas de accesibilidad (papeleras, farolas, aceras muy estrechas...). "Se ha mejorado, las ciudades están intentando que la accesibilidad sea mejor, con rampas, semáforos sonoros, aunque en el caso de Las Palmas de Gran Canaria faltan muchos". Admite que en el ámbito del transporte también se está intentando mejorar en adaptación, "y con las aplicaciones de los móviles hoy se pueden hacer virguerías", reconoce.

No obstante precisa que las principales barreras son las de la concienciación social. "Al final siempre es un tema de ser conscientes. Todo el mundo lo tiene claro sobre el papel, pero aún cuesta que por diferentes razones se lleve a la práctica. Cualquier obra que se va a hacer se debería siempre pensar que sea accesible y sin embargo siempre hay problemas, y no creo que sea por el presupuesto, porque la accesibilidad no es tan cara, de hecho es más caro hacerlo mal".

Luis Fernando Díaz de la Rosa apuntó al respecto que los buenos deseos y las promesas no sirven para nada si no se llevan a la práctica. "Hay compromisos políticos, hay normativas, y es verdad que se ha mejorado, pero aún queda mucho por hacer, en las escuelas, en el deporte, en la calle..., para lograr una accesibilidad total", concluyó.

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