Tenerife volvió a temblar. Desde el pasado sábado 28 de noviembre, la zona ha registrado un enjambre sísmico, que según los datos del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) superan la veintena de movimientos. La propia institución científica resume que los eventos están siendo localizados a una profundidad promedia de entre seis y ocho kilómetros bajo el nivel del mar.

El terremoto localizado de mayor magnitud hasta ahora, tiene una intensidad de 1,4 y ocurrió a las 11:05 horas de ayer, momento en el que se superaron la veintena de sismos según Involcan.

El Instituto Volcanológico de Canarias aclara a través de un comunicado en sus redes sociales que las características de estos eventos sísmicos reflejan "una relación con el sistema hidrotermal, que ha experimentado un proceso de presurización".

Este enjambre sísimico es similar a otros eventos que se vienen registrado en Tenerife desde el pasado mes de junio de 2017 "y como siempre es importante recalcar que no representa ningún tipo de preocupación de cara a la población". aclara el centro científico que concluye que "este tipo de enjambres son comunes en volcanes activos, y en un 90% de ocasiones desaparecen de la misma forma en la que se presentan".

Según los datos de mediciones del Instituto Geográfico Nacional (IGN), dos son los movimientos más significativos registrados en esa zona tinerfeña, aunque ninguno de ellos ha llegado a ser sentido por la población. En concreto, de la web del IGN se desprende que el de mayor intensidad alcanzó los dos grados y se registró a las 11:05 de ayer a una profundidad de nueve kilómetros.

Este terremoto vino precedido de un movimiento de hasta 1,7 grados registrado durante la noche del domingo en una zona cercana y a unos seis kilómetros de profundidad. Otros seísmos de intensidad menor se localizaron en diversas zonas de la Isla como Granadilla o Fasnia, además de los habituales en la zona del Volcán de Enmedio, aunque ninguno de ellos alcanzó, según el Instituto Geográfico Nacional, los dos grados del movimiento en Vilaflor alrededor de las once de la mañana.