"Todos han sido detenidos tras una investigación de un grupo de 'cabezas rapadas' acusado del asesinato de varias decenas de personas de origen no eslavo", señaló Mijaíl Ionkin, portavoz del Comité de Investigación de la Fiscalía, citado por la agencia Interfax.

Según Ionkin, el cabecilla de la banda era el estudiante Artur Rino, de 18 años, procedente de la ciudad de Yekaterimburgo, y detenido en abril del año pasado.

"Los cuatro han sido arrestados bajo acusación de asesinato premeditado", agregó el portavoz, que precisó que ya son nueve las personas arrestadas durante la investigación.

Por el momento, se les atribuyen 20 asesinatos, aunque "no se descarta que esta cifra pueda aumentar más adelante", subrayó.

Rino fue detenido en abril de 2007 junto al también estudiante Pável Skachovski, de 18 años, después de que testigos los señalaran como autores del asesinato del empresario armenio Karén Abramián, de 45 años, que recibió más de veinte heridas de arma blanca.

En el momento de la detención, la ropa de los sospechosos estaba manchada de sangre.

En el transcurso de la investigación, Rino confesó a la policía que había matado a 37 personas para "limpiar la ciudad" de Moscú de caucasianos.

En un primer momento los investigadores pusieron en duda las palabras de Rino, pero cuando comenzaron a verificar sus declaraciones se confirmaron varios de los episodios.

El centro analítico de defensa de los derechos humanos Sová denunció a finales de enero que los ataques racistas en Rusia han causado 69 muertos en 2007 y otros once en lo que iba de año.

Según defensores de los derechos humanos, en Rusia actualmente hay unos 60.000 ultraderechistas y militantes de grupos neonazis que centran sus ataques sobre todo en las personas procedentes de países del Cáucaso y Asia Central.

Entre sus víctimas, los racistas también han incluido a los extranjeros procedentes de África, Asia, América Latina, así como a los rusos representantes de las minorías sexuales, activistas de movimientos culturales juveniles y mendigos.