La Fiscalía del TSJC ha incoado diligencias informativas para determinar el uso que se puede dar a las 402 muestras de ADN de supuestas violaciones que guarda el Instituto de Medicina Legal, pues no tiene comunicación oficial de su existencia, informó su portavoz, Guillermo García Panasco.

Con el objetivo de dar una respuesta jurídica y oficial a la "controversia" que se ha generado tras conocerse la situación de estas muestras sin procesar, el primer paso será acreditar la existencia de dichas muestras, para lo que este mes se citará al jefe del Laboratorio de Genética, José Pestano, con el fin de que detalle a la Fiscalía la información de la que dispone, agregó.

La Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) pretende conocer el grado de conservación de estas muestras -que comenzaron a tomarse en los servicios de urgencias en 1998-, la cadena de custodia, si los partes médicos llegaron a los juzgados y, en su caso, por qué los fiscales no tienen "nada por escrito hasta el día de hoy", subrayó García Panasco, quien dijo que se trata de un "tema complejo".

Se determinará si sobre estos casos existió denuncia, si hay muestras de contrastes, así como si hay menores de 16 años entre el ADN conservado, tal como recogen documentos a los que accedió Efe.

Se trata de estudiar la situación y conocer el régimen jurídico de estas muestras, si se pueden usar como prueba en un proceso judicial e incluso si se puede iniciar una investigación penal a raíz de este ADN y "cuál podría ser el alcance", concluyó.