Un joven de 19 años perdió la vida en accidente de tráfico en la noche del viernes al sábado en Arrecife. El joven, del barrio de Altavista de la capital lanzaroteña y que responde a las iniciales I.T.C., no tenía carné de conducir, según informa Europa Press, que añade que no estaba aparentemente afectado por el alcohol.

El suceso ocurrió pasada la una de la madrugada. El joven, que iba solo en su vehículo, se salió de la calzada en una recta, la que une el Castillo de San José con la explanada de Puerto Naos. Presumiblemente por exceso de velocidad, perdió el control del vehículo, chocó contra un muro de la carretera y volcó sobre la parte derecha. Ayer por la mañana, sobre las antiguas salinas de Naos se podía ver restos del coche esparcidos en varios metros a la redonda e incluso el coche completamente destrozado.

Según testigos presenciales, "se especula que estaba compitiendo con otro vehículo en una carrera ilegal". En esta zona se concentran los fines de semana jóvenes que realizan este tipo de rallys. Se han contabilizado decenas de accidentes en esa zona por este tipo de imprudencias en los últimos años y varios muertos, todos ellos jóvenes.

Hasta el lugar se desplazó una ambulancia medicalizada del Servicio de Urgencias Canario, que trasladó al joven hasta el Hospital General de Lanzarote, donde falleció una hora después de producirse el siniestro, según los datos obtenidos en fuentes de los equipos de emergencia.

CIRCUNVALACIÓN. Tres jóvenes, con edades comprendidas entre los 20 y los 21 años, lograron salvar la vida después de sufrir un aparatoso accidente en la Circunvalación cuando el vehículo en el que viajaban dio varias vueltas de campana y se incendió. Aunque el turismo en el que viajaban quedó reducido a un amasijo de hierros, dos de los ocupantes lograron abandonar el habitáculo por sus propios medios, mientras que un tercero necesitó de la colaboración de un conductor para ser liberado del cinturón de seguridad antes de que las llamas se apoderaran totalmente de la máquina.

El espectacular accidente de tráfico se produjo poco después de la medianoche del viernes en la GC-23, en el tramo descendente comprendido entre la rotonda del hospital Doctor Negrín y la rotonda de acceso a Guanarteme.

Al parecer, el vehículo en el que viajaban los tres jóvenes, que circulaba a una velocidad inadecuada, perdió el control cuando transitaba bajo la rotonda del Doctor Negrín e inició una serie de trompos y vueltas de campana que se prolongaron por espacio de 160 metros. En este trayecto llegaron a invadir la mediana de la vía de incorporación a la GC-23 desde la rotonda, aunque afortunadamente no llegaron a colisionar con ninguno de los vehículos que transitaban.

El turismo quedó reducido a una chatarra. Sin embargo, dos de los tres ocupantes lograron salir por sus propios medios, mientras que un tercero quedaba atrapado. La providencial participación de un subinspector del Cuerpo Nacional de Policía libre de servicio que transitaba con su vehículo particular por la zona sirvió para liberar a uno de los jóvenes, que había quedado aprisionado por el cinturón de seguridad.

INCENDIO. Poco después de que los tres ocupantes dejaran el turismo, éste se prendió fuego y las llamas se adueñaron de su interior. El fuego sería sofocado poco después por la dotación de los Bomberos de la capital que a aquella hora regresaban al parque de Miller tras intervenir en la caída de un ascensor en un edificio de la calle Bernardo de la Torre, número 41, en la que no hubo que lamentar víctimas al no encontrarse ocupado.

Los heridos en el accidente de tráfico de la Circunvalación han sido identificados como R. E. P. S., de 20 años, que resultó herido leve y que, según datos de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria iba al volante del turismo. Otro de los accidentados, también leve, es I. M. R., de 21 años. El herido de mayor gravedad es A. R. S., de 20 años, quien presentaba múltiples traumatismos y quedó ingresado en el Hospital Doctor Negrín.

La Policía Local se encargó de instruir las diligencias por este accidente.