La Guardia Civil interroga desde ayer a un sospechoso para verificar su implicación en el crimen del ciudadano nigeriano de 33 años que resultó muerto el sábado por la tarde después de ser agredido con cuatro puñaladas en Vecindario. Según fuentes de la investigación, el detenido se encuentra en el primer círculo de amistades más próximas al asesinado, mientras que la Benemérita sigue buscando al menos a un persona más, posiblemente el autor material de la agresión.

Aunque en un primer momento se barajó la implicación de tres personas en el suceso, finalmente la investigación cree que fueron dos las personas involucradas, pero aún está por aclarar si la persona que está siendo interrogada es una de las dos que participaron. En cualquier caso, el retenido podría aportar datos esclarecedores sobre el suceso, ya que la Guardia Civil considera que la agresión procede de personas cercanas a la víctima y de su círculo de conocidos, que forman parte del trapicheo de drogas y que terminaron con la vida de este nigeriano por un presunto ajuste de cuentas. De hecho, el detenido compartía vivienda con el fallecido.

Después de cometerse el crimen, que tuvo lugar a media tarde del sábado, la Guardia Civil puso en marcha un intenso operativo de búsqueda de las dos personas que salieron huyendo de la escena del crimen, una de ellas con un cuchillo de grandes dimensiones en la mano. Los vecinos de la zona donde sucedieron los hechos comprobaron que los agentes habían detenido a un hombre que vive en el mismo inmueble de la víctima. No obstante, la Guardia Civil considera que la detención del principal implicado en esta muerte se realizará más pronto que tarde, una vez se determinen las causas de la agresión.

RASTRO. El fallecido, un ciudadano nigeriano de 33 años, falleció tras recibir cuatro puñaladas según parece por dos jóvenes que posteriormente huyeron del lugar. El agredido salió malherido de la escalera donde fue apuñalado y caminó unos 80 metros hasta el locutorio de una calle cercana, donde cayó al suelo ya muerto. El rastro del fallecido huyendo del lugar donde fue acuchillado quedó evidenciado en el suelo por donde pasó, ya que tanto las escaleras de acceso al domicilio donde tuvo lugar el suceso como las calles por donde caminó antes de fallecer se encontraban ensangrentadas.

Según un testigo presencial, los dos presuntos autores de las puñaladas mortales salie-ron corriendo por la misma calle Honduras en sentido ascendente, el contrario al que salió la víctima, portando uno de ellos un cuchillo o navaja de unos 30 centímetros.

En un primer momento y una vez que el juez ordenó el levantamiento del cadáver, se barajaba la hipótesis de que fueran tres los implicados en el crimen, aunque ahora son dos las personas que supuestamente participaron directamente en los hechos. Con el interrogatorio del sospecho, la Benemérita intenta aclarar su grado de participación y, sobre todo, estrechar el cerco sobre el autor o autores, a los que se podrían detener en pocas horas si la investigación avanza.