El Cuerpo Nacional de Policía ha confirmado que la mujer que murió en la mañana de este viernes en la localidad de Los Cristianos es una súbdita británica de 60 años de edad.
Pasadas las 10:30 horas, agentes del Cuerpo Nacional de Policía, adscritos a la Comisaría de Sur de Tenerife procedieron a la detención del ciudadano búlgaro Deyan Valentinov D., de 28 años de edad.
El acusado, instantes antes de su detención, había entrado en un establecimiento comercial sito en la Avenida de Amsterdam, nº 1, en Los Cristianos (Arona) para, acto seguido, decapitar con un arma blanca a la mujer, que se encontraba en el interior del mismo como clienta. Tras la agresión, el agresor salió al exterior del establecimiento exhibiendo la cabeza en su mano para después arrojarla al pavimento.
En el momento de la detención el presunto homicida, al cual le constaban detenciones anteriores por delitos de daños y lesiones, se encontraba forcejeando con un vigilante de seguridad con la intención de evadirse.
Según se desprende de los datos obtenidos hasta el momento, no existía relación alguna entre víctima y agresor, informa la Policía.
En el lugar de los hechos se personaron efectivos del Grupo de Crimen Organizado y Policía Científica de la misma Comisaría Local, continuándose en la actualidad con las investigaciones.
Según informó el Centro Coordinador de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias (Cecoes), a las 10:25 horas recibió varias alertas de que una mujer había sido herida por arma blanca en la citada vía.
En ese momento, el Cecoes activó Policía Nacional, Policía Local y dos ambulancias del Servicio de Urgencias Canario, una medicalizada y otra básica.
Según apuntaban las primeras informaciones policiales, la agresión tuvo lugar en el interior de un comercio del Valdés Center de Arona, donde el agresor entró, robó un cuchillo ante la gente que se encontraba en ese momento en el local e hirió mortalmente a una mujer que realizaba unas compras, cortándole la cabeza.
Un testigo presencial, en declaraciones a Radio Club Tenerife, declaró que cuando se disponía a aparcar en la Avenida Juan Carlos I vio a un hombre corriendo con algo ensangrentado entre las manos. "Entonces el guardia de seguridad se abalanzó sobre él y después lo que pude ver es que llevaba en la mano la cabeza de una mujer", aseguró este testigo presencial minutos después del homicidio.
