El magistrado de la Sección V de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife ha condenado a 19 años de prisión a Salvador Morales como autor del asesinato en 2009 de su expareja sentimental Isabel Canino.

Morales ya había sido condenado por un jurado popular y ahora el magistrado, en la sentencia hecha pública hoy, además de los 19 años de prisión, le condena a indemnizar con 110.000 euros a los padres de Isabel Canino y con 70.000 a su hermana.

El jurado popular consideró probado que Morales mató a Canino con una brida y escondió su cuerpo en una fosa séptica hallada en la vivienda del hombre en La Laguna, hechos que para el juez son constitutivos de un delito de asesinato.

El cuerpo de la mujer fue encontrado el 28 de mayo de 2009, 72 días después de su desaparición.

En la vista oral el fiscal y el abogado del Estado acusaron a Morales de asesinato y pidieron 20 años de prisión y 250.000 euros de indemnización para la familia mientras que la acusación particular solicitaba el mismo tiempo de cárcel y 500.000 euros para sus padres y 100.000 para su hermana.

La defensa de Salvador Morales reconoció el agravante de parentesco por lo que pidió la pena mínima de 17 años de cárcel y 90.000 euros de indemnización.

Después de diez días de juicio, el jurado consideró que quedaba demostrado que el ahora condenado ató las manos de Isabel Canino con una brida y la asfixió con otra, impidiendo que ella pudiese defenderse.

La muerte le fue causada "en muy poco tiempo" y por "asfixia mecánica", detalló el portavoz del jurado, al tiempo que le achacó al acusado "seguir haciendo su vida normal" después de asesinarla y sellar su lápida con baldosas para que no se pudiera advertir su presencia.

El jurado también consideró demostrado que Salvador Morales e Isabel Canino mantuvieron una relación extra matrimonial, llegando a convivir juntos como pareja durante un año, lo cual "hace que su conducta sea más reprochable".

A lo largo del juicio, la defensa insistió en que no hay pruebas suficientes que indiquen que él fue quien mató a Isabel Canino y ha acusado a los testigos de "mentir descaradamente".

Pese a que el jurado descartó la existencia de una tercera persona, el abogado de Salvador Morales criticó que no se haya localizado "al informático" al que su defendido señala como el autor del asesinato de la que fue su pareja sentimental y laboral en la empresa de transportes Titsa.