Un hombre de 52 años y vecino de Santa Lucía de Tirajana perdió la vida en la tarde de ayer después de volcar con su todoterreno y precipitarse desde más de 60 metros en un camino vecinal de la localidad de Tirma, en el municipio de Artenara, cerca del Andén Verde. Junto al fallecido viajaba su hijo, de 14 años, que sufrió fracturas en una pierna, según informaron diversas fuentes que actuaron en el lugar.
El fatal suceso se produjo sobre las 19.30 horas cuando el vehículo en el que viajaban los dos ocupantes transitaba por una carretera de tierra en la zona de la finca de Tirma. Al parecer, el todoterreno subía para salir de la zona en dirección Artenara, en una zona de zig-zags, cuando se salió de la vía y comenzó a volcar ladera abajo. Según indicaron varias fuentes, el 4x4 comenzó a dar vueltas de campana durante unos 60 metros, hasta que finalmente se paró en la misma carretera.
El menor que viajaba de copiloto logró salir del habitáculo al sufrir fracturas en su pie izquierdo y magulladuras, y acudió hasta el asiento del piloto, en donde se encontraba su padre, al que sacó del interior del vehículo. Posteriormente, el propio hijo fue el que alertó al Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112, y fue él mismo quien comenzó a atender a su progenitor.
Bomberos del Consorcio de Emergencia de Gáldar y La Aldea de San Nicolás, así como agentes de la Policía Local de Agaete, de la Guardia Civil y Cruz Roja de La Aldea, acudieron hasta el lugar de los hechos, que se hallaba en una zona de difícil acceso, y comenzaron a intentar estabilizar al conductor, que se encontraba inconsciente en el lugar de los hechos.
Dos helicópteros acudieron hasta la zona de Tirma y comenzaron primero con el traslado del padre, quien fue izado por el aparato aéreo del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES), que lo trasladó hasta una zona en la parte superior de la montaña en donde se hizo un trasbordo al helicóptero medicalizado del Gobierno de Canarias.
Durante su traslado hasta el Hospital Doctor Negrín de Las Palmas de Gran Canaria el afectado finalmente fallecía debido a los numerosos politraumatismo por el fuerte accidente que sufrió.
Su hijo, quien tuvo que ser atendido en un principio por los agentes de las fuerzas de seguridad municipal, tuvo que ser evacuado también por el helicóptero del GES hasta la helisuperficie del citado centro hospitalario con un traumatismo en miembro inferior de carácter grave.
Según apuntaron las mismas fuentes, ambos habían acudido a la zona para dar de comer a un ganado de animales que tenía el fallecido, y en el momento del accidente se disponían a regresar a su vivienda después de pasar el día.
