La tienda de deportes Ancalia de San Gregorio, en el municipio de Telde, sufrió en la madrugada de ayer el segundo robo en poco más de un mes, cuyo coste puede ascender entre 8.000 y 9.000 euros Así lo expresó de la empresa el encargado Oswaldo Trujillo Martín. "Los dueños están destrozados y todo el personal está muy preocupado, porque esto no ayuda nada a salir de la crisis", expresó.
El robo de la empresa, cuyos dueños son José Santana y Julia Santana, se produjo sobre las dos de la madrugada, cuando presuntamente dos personas rompieron una ventana cerca de la puerta principal y se llevaron material deportivo del interior de la tienda, situada entre la calle Rivero Bethencourt, esquina con la de Bello Artiles. "Es terrible que te llamen a las dos de la madrugada cuando duermes y te dicen que te han robado otra vez, sabiendo que las cosas están mal y que estamos luchando con la crisis", expresó Oswaldo Trujillo.
A plena luz del día
"La otra vez el robo se produjo el 15 de agosto a plena luz del día de fiesta, cuando no había nadie en la calle y había un calor tremendo", señaló el encargado de Ancalia. Todavía no le han pagado el costo de las piezas. "El problema de la crisis, las dificultades de aparcamientos y los que aparcan por aquí tienen la psicosis de la policía atrás, todo esto no nos ayuda nada", agregó.
"Antes teníamos aquí la planta de oportunidades y no pasaba estas cosas, pero anteriormente llegaron a empotrar las ventanas con un coche hasta tres veces en un mes a finales de los 90", recuerda Oswaldo Trujillo. "Pero, ahora no sé qué pretenden, porque estoy seguro de que quienes robaron han entrado aquí otras veces y saben lo que hay", apuntó. "Creo que son los mismos que robaron en agosto, porque se llevan prendas que se pueden colocar en el mercado como camisetas las más caras y lo último en chándals, etc.", lamentó.
Decepción y preocupación
Para el encargado de la tienda Ancalia, "estos hechos nos matan, nos dejan sin ganas de nada, porque incluso la policía estuvo a punto de cogerlos". "La alcaldesa dijo el otro día que ha puesto cámaras de vigilancia en Telde, pero Telde empieza de la iglesia para abajo y nosotros estamos a menos de cien metros y no se nos tiene en cuenta", se quejó.
Alexander de la Guardia, dueño de una joyería cercana al comercio Ancalia, mostró su preocupación. "Pusieron un policía de barrio, pero eso no soluciona nada", manifestó. De la Guardia pide, asimismo, que "se incremente la seguridad del Estado, sobre todo, porque eso nos cuesta dinero y la inseguridad aquí va a mayor", reconoció el empresario.
