El pesquero canario Nuevo Francisco Javier, con base en el puerto de La Luz y Las Palmas, zozobró el pasado martes a unas 12 millas de Cabo Blanco, en la costa mauritana, debido a una avería que le provocó una vía de agua. Los ochos tripulantes, entre los que se encontraba el patrón, Gustavo G., de 43 años y natural de Las Palmas de Gran Canaria, y Mateo G., vecino de Arrecife de Lanzarote y de 50 años, fueron rescatados por un pesquero polaco con lesiones de carácter leve.

La vía de agua en el Nuevo Francisco Javier fue descubierta sobre la una y media de la tarde del martes, cuando el pesquero, de 18 metros de eslora y 36,5 toneladas de registro bruto, se hallaba en aguas cercanas a Cabo Blanco, en las proximidades de la ciudad mauritana de Nuadibú.

El patrón dio el aviso al buque hospital español Esperanza del Mar por la avería del barco y solicitaba ayuda, por lo que de inmediato se alertó a numeras embarcaciones españolas y extranjeras que se encontraban en la zona para que acudieran a socorrerlos. Dos pesqueros que faenaban acudieron al lugar y fueron los tripulantes de uno de ellos, el Sirius de bandera polaca, los que intentaron achicar el agua del barco sin éxito, por lo que decidieron sobre las seis de la tarde dejar que el pesquero canario se hundiera y rescataron a los afectados.

Los ochos tripulantes del barco naufragado, de los que cinco son de nacionalidad mauritana, uno de ellos marroquí y los otros dos canarios, fueron evacuados hasta el puerto de Nuadibú, adonde arribaron sobre las siete de la tarde.

Hipotermia y ansiedad

Los dos marinos canarios presentaban síntomas de ligera hipotermia, escalofríos y ansiedad, como indicó el médico Mohamed Ali, que los atendió recién llegados a puerto. El marinero marroquí presentaba traumatismo torácico por una contusión y el resto de tripulantes fueron atendidos por síntomas leves de hipotermia.

Todos los marineros fueron llevados a un hospital de Nuadibú, donde se les realizó el reconocimiento médico, para luego descansar y pasar la noche en dicha ciudad. Durante la mañana de ayer, los dos canarios comenzaron las gestiones ante las autoridades marítimas mauritanas en relación a la investigación de lo ocurrido, así como para regresar a Gran Canaria.