Los trabajos de los dispositivos de extinción en los incendios de La Gomera y de La Palma lograron ayer buenos resultados. Esta fue la conclusión del consejero de Economía, Hacienda y Seguridad del Gobierno de Canarias, Javier González Ortiz, que compareció ayer en las instalaciones del CECOES 1-1-2. Estos resultados "nos permiten ser optimistas a la hora de valorar la situación, aunque todavía hay que esperar", informó.

En efecto, los hidroaviones del Estado ayudaron a sofocar los incendios, pero alentaron otros fuegos "políticos". El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, dijo ayer que "sería bueno que no se esperara al último momento para solicitar los hidroaviones" cuando se declara un incendio. El ministro presentó estas declaraciones a los periodistas durante la visita que realizó acompañado por la delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento, a las instalaciones del centro de operación de la Unidad Militar de Emergencia (UME) que trabaja en La Gomera en la extinción del incendio.

El ministro indicó que los hidroaviones, que fueron solicitados a las 1:20 horas de la madrugada del domingo, ya estaban operando por la noche del mismo día en los incendios de La Gomera y La Palma. "Los hidroaviones no están en Canarias y por lo tanto requieren un periodo de desplazamiento y si se solicitan de madrugada deben despegar a primeras horas de la mañana, dado que no pueden operar durante la noche", advirtió Soria.

Hasta ayer, tanto en La Palma como en La Gomera trabajaban en la extinción de los incendios unos 125 miembros de la UME, además de tres hidroaviones del Ministerio de Agricultura. Dos de estos hidroaviones se trasladaron a La Gomera, en donde no han podido actuar antes debido a que las condiciones meteorológicas de la mar les impedía repostar.

"Los medios del Estado trabajan desde el sábado cuando empezaron a actuar miembros de la UME, se nos pidió colaboración por la tarde y por la noche ya se estaba actuando", dijo el ministro, y recordó que la UME tiene destacamentos permanentes en los aeropuertos de Tenerife y Gran Canaria.

Por su parte, el presidente canario, Paulino Rivero, reclamó ayer al Gobierno de España que estableciera en las islas una base permanente de hidroaviones para combatir los incendios forestales, dada la tardanza con la que llegan esos refuerzos cuando hay alguna incidencia, no menos de 24 horas. Rivero indicó que para combatir los fuegos que desde el sábado afectan a La Palma y La Gomera, el Gobierno canario pidió ese día a última hora la presencia de hidroaviones, que no llegaron a las islas desde la península hasta las seis de la tarde del domingo.

"El Gobierno de España responde con diligencia para poner a nuestra disposición los medios", afirmó Paulino Rivero, pero el problema es la distancia de 2.000 kilómetros que tienen que recorrer los aparatos desde la península.

Las 24 horas que suelen tardar los refuerzos "son muchas horas" porque o los incendios se logran atajar en las primeras seis u ocho horas "o se convierten en un problema muy importante". Por eso, es imprescindible que se mantengan tres o cuatro hidroaviones en las islas en el verano y que complementen a los medios con los que cuenta Canarias y los cabildos, agregó. Explicó que el año pasado ya se hizo una petición formal por parte del Gobierno de Canarias, y se volverá a realizar otra en cuanto se controlen los incendios.