Los restos mortales de la deportista grancanaria Pino Becerra, de 42 años, quien falleció el pasado fin de semana en un accidente durante una excursión junto a una amiga en el suroeste de Islandia, serán incinerados durante la próxima semana en la Reikiavik, la capital del país nórdico. Su compañera continúa desaparecida tras el suceso, por lo que un amplio dispositivo sigue buscando en Bleiks?árgljúfri, donde ocurrieron los hechos.

Dos de los hermanos de la fallecida tienen previsto viajar el próximo lunes hasta Reikiavik para cerrar los procedimientos burocráticos que les permitan incinerar el cadáver de Pino Becerra Bolaños. Según indicó Ángel, uno de sus hermanos, el deseo de la familia es que el próximo miércoles la funeraria acceda a realizar la incineración ya que se encuentran con el problema de que en el país escandinavo esta operación sólo se realiza los martes y, precisamente, el próximo es festivo en la región.

Por ello, desde la Embajada de España en Noruega se está agilizando todo lo posible para que se realice durante la próxima semana para que así sus cenizas sean trasladadas el viernes a Gran Canaria. Asimismo, esperan la aprobación de la policía islandesa después de que ayer le realizarán la autopsia al cadáver de la grancanaria.

Ángel Becerra, quien agradeció las numerosas muestras de cariños que han recibido estos días de amigos y conocidos de Pino Becerra, apuntó que en cuanto los restos se encuentren en el Archipiélago prevén realizar una misa-funeral en honor a su hermana.

Por otro lado, decenas de personas volvieron a rastrear ayer, por cuarta jornada consecutiva, en los alrededores de río de la zona de Bleiksárgljúfri para tratar de encontrar a la otra mujer desaparecida, una islandesa que acompañaba a Pino Becerra. La búsqueda se centra en un cañón adonde ambas habían ido de excursión.