Lo que menos se iba a esperar J. C. R., fue que el domingo por la noche iba a perder la vida cuando supuestamente iba a perpetrar un atraco contra dos ancianos, tarea que a priori se presentaba fácil dada la avanzada edad de las víctimas. J. C. R., procedía del barrio de Las Moraditas de Taco en Santa Cruz de Tenerife y su cómplice, que ya ha sido identificado, se movían entre el ambiente de delincuencia que pulula por una de las barriadas más conflictivas de Güímar. Al parecer, el socio del fallecido es otro precoz delincuente que ha sido visto en distintas ocasiones en el Puertito de Güímar. Fuentes policiales consultadas ayer apuntaron que el fallecido contaba con antecedentes policiales aunque no penales y que se trataba de pequeños hechos delictivos. El problema fueron las compañías con las que se unió así como el hecho de dedicarse al asalto de viviendas. Ayer, el cuerpo de fallecido aún permanecía en el Instituto Anatómico Forense de La Laguna.