El ex primer ministro australiano Malcom Fraser, un político liberal que jugó un papel clave en la crisis constitucional de 1975, murió ayer a los 84 años por enfermedad.

Fraser se convirtió en 1975 en el líder de la oposición del entonces gobierno del laborista Gough Whitlam, cuya destitución provocó una crisis constitucional que terminó con la designación de este político como primer ministro interino hasta las siguientes elecciones en las que legitimó su cargo. El actual primer ministro, el conservador Tony Abbott, enumeró logros de Fraser, como su oposición al apartheid, la reubicación de los refugiados vietnamitas, la defensa de los derechos de los indígenas o las leyes a favor de la libertad de información.