La asociación de afectados del vuelo JK5022, que agrupa a damnificados de la catástrofe aérea ocurrida en el aeropuerto de Barajas en 2008 en la que murieron 154 personas, solicitó ayer "dignidad" y "respeto" para las víctimas del avión siniestrado en los Alpes franceses y sus familias. En un comunicado, este colectivo manifestó su "apoyo incondicional" y "solidario" a los afectados, y recordó que el Estatuto de la Víctima, que actualmente está en trámite parlamentario, prohíbe a los profesionales "acosar o acercarse a las víctimas" para ofrecerles sus servicios.