La Policía ha detenido en Gran Canaria a dos individuos que se dedicaban a colocar dispositivos en los cajeros automáticos que les permitían robar el dinero retirado por los clientes, que pensaban que su operación no se había llegado a completar debido a algún tipo de error.
Los dos sospechosos, Jan Florin S. y Jessica P., colocaban en un modelo concreto de cajero automático un dispositivo, llamado "cepo", que se integraba en la ranura de expulsión de los billetes. La investigación sobres estos hechos se abrió al detectarse un aumento de este tipo de estafas en varias localidades de la isla. Tras examinar las imágenes de las cámaras de seguridad de los cajeros afectados en Playa del Inglés, los agentes concluyeron que existía un grupo especializado un tipo de cajero automático.
El "cepo" que colocaban sobre la ranura de expulsión del dinero aparentaba formar parte del cajero, se integraba perfectamente y no levantaba sospecha alguna en los usuarios, destaca la Jefatura Superior de Policía de Canarias en un comunicado.
Cuando el cliente completaba la operación, el cajero devolvía la tarjeta, pero el dinero quedaba retenido tras una placa metálica, fuera de la vista. El usuario abandonaba el cajero pensando que se había producido algún error, lo que permitía a los detenidos acudir a retirar el "cepo" y llevarse el dinero sustraído. En el registro practicado en el domicilio donde residían los detenidos se intervinieron varios "cepos capturadores" preparados para su utilización.
