La policía de Pekín ha logrado rescatar con vida a una niña recién nacida a la que, supuestamente, su madre tiró a un váter público, después de que algunas personas escucharan el llanto del bebé y alertaran a las autoridades. "La cabeza del bebé estaba hacia abajo y casi todo su cuerpo ya había caído en el desagüe", manifestó Qian Feng, el agente que logró sacar del inodoro a la pequeña, según publica ayer el diario Beijing Times.