La Guardia Civil continúa rastreando el fondo del mar en las proximidades del muelle de Gran Tarajal en busca de fardos de droga que se sospecha pudieron haber sido lanzados por una embarcación neumática el pasado domingo. El instituto armado tiene controlados e identificados a dos sospechosos que son conocidos en el ambiente policial. Uno es vecino de Gran Tarajal y el otro es marroquí.

El pasado domingo una patrulla de agentes de la Guardia Civil, cuando se encontraba de servicio en las inmediaciones del muelle de Gran Tarajal, divisó una embarcación neumática semirrígida con dos tripulantes a bordo que trataba de llegar hasta los pantalanes del citado puerto. La actitud nerviosa de los dos hombres, un español y un magrebí, levantó la sospecha de los agentes.

La embarcación llegó hasta los pantalanes donde se bajó uno de los tripulantes, que tiró un objeto al mar y salió corriendo, aunque pudo ser reducido por los guardias. Inmediatamente ordenaron a la otra persona que se encontraba a bordo que se detuviera, pero hizo caso omiso a las indicaciones de los funcionarios del instituto armado y se fugó en la embarcación poniendo rumbo hacía la zona de Agando. Unos 40 minutos más tarde regresó de nuevo al muelle sin nada en el interior de la embarcación, aunque fue conducido hasta las dependencias policiales.

Ante la sospecha de la Guardia Civil de que en el interior de la embarcación podía haber fardos de drogas y que los mismos fueron arrojados al mar, se solicitó la intervención del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) del instituto armado, con base en Gran Canaria, que desplazó el pasado lunes a varios de sus efectivos hasta la Isla para poder localizar en el fondo del mar la droga.

Tras rastrear las coordenadas marcadas por los radares del SIVE, los buzos se han sumergido durante estos días sin resultado alguno. Ayer se sumaron a las labores miembros de la Unidad de Rescate Subacuático del Cabildo de Fuerteventura para ampliar la zona de reconocimiento, pero los trabajos se suspendieron debido a las malas condiciones de visibilidad. Los buzos del Cabildo majorero inspeccionaron la franja comprendida entre el muelle de Gran Tarajal y la zona de Agando, pero tampoco divisaron nada.

Los trabajos se reanudarán mañana viernes con una nueva batida en busca de la droga.