La Policía Nacional detuvo a un hombre de 53 años de edad, sin antecedentes policiales, cuando fue descubierto por agentes que patrullaban por Los Giles, en Las Palmas de Gran Canaria, cuando conducía un turismo fumando lo que parecía a primera vista un porro.

Después de darle el alto, los policías de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana comprobaron que el conductor estaba consumiendo hachís. En un primer momento, los agentes comprobaron que el conductor llevaba en esos momentos una botella de coñac en el bolsillo de la cazadora, además de presentar unos claros síntomas de embriaguez. Por ello, la patrulla pidió entonces la colaboración de la Policía Local de la capital grancanaria, para que le realizaran al conductor la prueba de alcoholemia.

Así, los policías locales certificaron que presentaba una tasa de alcoholemia que multiplicaba por cuatro el máximo permitido, después de que realizara un test de alcoholemia en aire espirado, como informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Canarias.

Finalmente, tras soplar en el medidor, el detenido dio positivo, con una tasa de alcohol cuatro veces superior a la permitida.

Una vez instruido el correspondiente atestado policial, fue remitido a la autoridad judicial correspondiente, ya que al mencionado automovilista se le acusa como presunto autor de un delito contra la seguridad del tráfico.