Los Mossos d'Esquadra investigan la muerte de un bebé cuyo cadáver fue localizado la noche del miércoles en un contenedor, en la localidad barcelonesa de Santa Coloma de Gramenet, tras el aviso de hallazgo dado por un vecino. El bebé habría fallecido unas 4 horas antes de su descubrimiento, como certificó el forense. Este recién nacido porque aún llevaba el cordón umbilical, confirmaron vecinos que presenciaron el suceso. Los agentes investigan entre los vecinos por si conocen a alguna mujer que estuviera embarazada. Fue un residente el que alertó a la policía catalana, aunque fue un inmigrante subsahariano el que, rebuscando entre la basura, se percató de la presencia del niño. Según explicó la vecina Antonia Rodríguez, el cadáver estaba "liadito en una manta y con mucha ropa y fue un chico del bar el que llamó a la policía". Los agentes investigan las huellas en el recipiente y las imágenes de las cámaras de seguridad en la zona.