Florencio A. C., de 71 años, detenido como posible autor del crimen de su esposa, Marina R. B., de 69, en su casa de la parroquia de Tameiga (Mos) pasará hoy a disposición del Juzgado de Instrucción 2 de Porriño, en funciones de guardia, tras permanecer en el calabozo del cuartel de la Guardia Civil, en Vigo, desde la madrugada de ayer.

El cuerpo de la víctima apareció el martes por la noche en el suelo de la cocina de su vivienda, en la calle Rans. La autopsia ha determinado, según fuentes próximas al caso, que la muerte fue violenta: la sexagenaria presentaba numerosos y contundentes golpes en la cabeza, por la que la hipótesis en la que trabaja el Instituto Armado es que se trata de un homicidio de violencia de género.

La víctima presentó una denuncia ante la Guardia Civil contra su marido en octubre de 2014 por malos tratos físicos y psíquicos habituales, si bien tras las declaraciones testificales, las diligencias se transformaron en un juicio de faltas por insultos, en el que ella, informó el TSXG, retiró la denuncia, por lo que el caso fue archivado.

El cuerpo de la víctima presentaba "evidentes signos de violencia", según informó la Delegación del Gobierno. Aunque había cautela oficial a la espera de que el juzgado recibiese el informe de la autopsia, ya que hasta ese momento no se podría descartar por completo una muerte accidental, las fuentes consultadas señalaron ayer al cierre de este edición que la prueba forense arrojó que fue una muerte violenta. Agentes de la Guardia Civil buscaron pistas ayer durante horas para tratar de esclarecer lo sucedido. Revisaron la vivienda y la finca, así como el vehículo del detenido aparcado frente a la casa y lleno de bolsas y materiales.

Cuando acudió a la Guardia Civil, el detenido negó haber matado a su mujer. Aseguró haberla encontrado muerta cuando llegó a casa alrededor de las 21.30 hora canaria, si bien, algún vecino afirmaba ayer haber visto el vehículo del hombre en casa ya antes de las 21.00 horas.

El mayor de los dos hijos de la pareja no descartaba ayer que a su madre "quizás le dio algo". Según explica esta debía seguir un tratamiento médico y "a veces no lo tomaba".

Por otro lado, agentes del instituto armado iniciaron ayer la investigación sobre el hallazgo del cadáver de una mujer, con aparentes signos de violencia, en un paraje de la diputación de La Torrecilla, en Lorca, indicaron a Efe fuentes de este cuerpo.

La víctima, que está pendiente de identificar plenamente, fue encontrada en la tarde del pasado martes por un hombre y su hijo que paseaban por la zona.

Fuentes cercanas al caso han explicado que no se descarta que se trate de una vecina de nacionalidad extranjera residente en esa pedanía, y cuya familia presentó la denuncia de su desaparición hace "tres ó cuatro días".

Finalmente, la Benemérita se hizo cargo de la investigación, sobre la que no han trascendido más detalles.