Los Mossos d'Esquadra encontraron el cadáver de un niño de unos siete años en un domicilio de Gerona donde, al parecer, llevaba varios días muerto, aunque todavía se desconocen las causas. Según fuentes cercanas al caso, la propietaria de un inmueble ubicado en la calle Joan Roca i Pinet, en el barrio del ensanche de Gerona, acudió al domicilio para intentar cobrar el alquiler que le adeudaban. La mujer oyó gritos y alertó a los Mossos, queen una habitación hallaron el cadáver.