La Policía Nacional detuvo en Madrid a dos personas por colocar 104 cepos en cajeros automáticos de las comunidades madrileña y valenciana y que ocasionaron daños valorados en 40.000 mil euros. Con estos dispositivos, conseguían bloquear la salida del dinero y cuando la víctima se iba pensando que la operación fue cancelada, retiraban el cepo y se llevaban el dinero.