Lo que pudo acabar supuestamente en un lamentable caso de violación terminó en agresión sexual e intimidación, aparte de sufrir ansiedad y nerviosismo, para una mujer natural de Gran Canaria que venía de divertirse el pasado sábado durante la cabalgata del Carnaval capitalino. Los gritos y la petición de auxilio de la afectada al ver un coche patrulla de la Guardia Civil evitaron consecuencias de mayor gravedad.
Los funcionarios del instituto armando que patrullaban en el interior del puerto de La Luz y Las Palmas, detuvieron la madrugada del pasado día 21 de febrero a tres jóvenes de nacionalidad rusa, V. K., A. G. y A. A., los dos primeros de 23 años y el otro de 28.
Los tres arrestados forman parte de la tripulación de un barco que estaba atracado en las instalaciones portuarias capitalinas. Están acusados de cometer los delitos de detención ilegal y agresión sexual. Además, V. K. también está acusado de los delitos de resistencia y desobediencia a la autoridad.
El suceso ocurrió en torno a las 01.30 horas del pasado domingo día 21 de febrero en la explanada Tomás Quevedo. La mujer estaba desorientada. Al parecer, se encontraba bajo los efectos del alcohol. Ella pretendía en esos momentos ir a su casa, pero no sabía cómo salir de la zona portuaria y les preguntó a tres hombres que vio en por la zona, como denunció y como informó ayer la Comandancia de Las Palmas.
Los tres marineros, que le prometieron que le indicarían por dónde ir, la llevaron a un lugar más apartado de la calle y comenzaron a agarrarla, con tocamientos no permitidos, intimidaciones y con las presuntas pretensiones de forzar a la fémina.
Los guardias civiles integrantes de la patrulla vieron cómo una mujer intentaba zafarse de tres personas que la rodeaban y la agarraban, mientras ella pedía ayuda. Ante ello, los agentes intervinieron de inmediato.
Los tres sospechosos fueron detenidos, aunque uno de ellos, V. K., se "puso bravo" ante su posible arresto y se resistió, por lo que fue reducido por los guardias civiles.
La víctima denunció lo ocurrido y fue trasladada, con claras muestras de nerviosismo y ansiedad, a un centro de salud y posteriormente al Hospital Materno Infantil, donde estuvo ingresada hasta el lunes. Finalmente, los tres detenidos pasaron a disposición del juzgado de guardia en Las Palmas de Gran Canaria.
