La Guardia Civil detuvo ayer en Tenerife a un hombre de 28 años que se dio a la fuga en un control de alcoholemia y continuó conduciendo su vehículo bebido, drogado y sin carné, hasta que finalmente se estampó contra un muro, tras lo que el coche patrulla que lo perseguía se chocó contra él sin que se produjeran heridos.

El suceso ocurrió a las seis y media de la mañana de ayer en un punto de control de alcoholemia del kilómetro 9 de la carretera TF-5, en la rotonda Padre Anchieta de La Laguna, cuando un Peugeot 208 hizo caso omiso de la señal de alto de los agentes y se dio a la fuga, según informaron a Efe fuentes de Tráfico.

El vehículo, ocupado por el detenido, su pareja y otro hombre, prosiguió su camino por la autopista en dirección a Santa Cruz de Tenerife de manera temeraria y haciendo zigzag en la carretera, hasta que se salió por la margen izquierda de la vía en una curva pronunciada a la derecha.

Entonces, el coche chocó contra un muro y rebotó hasta quedarse en medio de la calzada, momento en el que la patrulla de la Guardia Civil que lo perseguía desde la rotonda se estampó por detrás contra él.

Los agentes de Tráfico, que resultaron ilesos, se dispusieron a detenerlo, a lo que el hombre se resistió propinándoles patadas con el auxilio de su pareja, que viajaba a su lado. Tanto él como la mujer no resultaron heridos y tan solo se le ha diagnosticado un latigazo cervical al otro ocupante del vehículo.

Finalmente, los guardias civiles consiguieron reducir al conductor y le practicaron las pruebas de drogas y alcoholemia.

Tres delitos

En las de alcohol dio un resultado de 0,49 y 0,51 gramos por li- tro (el límite es 0,30) y también dio positivo en drogas a cocaína, hachís y metanfetamina. Los agentes comprobaron asimis- mo que el joven no tenía carné de conducir.

El hombre fue detenido por atentado a la autoridad, conducción temeraria y conducción bajo los efectos del alcohol y de las drogas. Pasará a disposición judicial por esos tres delitos.