La Policía Nacional arrestó a siete personas, integrantes de una red que explotaba sexualmente a jóvenes africanas, a las que sometía con ritos de vudú para doblegar su voluntad y asegurarse el pago de la deuda por haber viajado hasta España.

Dos mujeres, una de Nigeria y otra de Sierra Leona, han sido liberadas de esta red que operaba en la localidad de El Fraile, en el municipio tinerfeño de Arona, donde fueron detenidos cinco personas, mientras que las otras dos fueron arrestadas en Alcalá de Henares (Madrid), municipio en el que también operaba esta trama.

La víctima captada en Nigeria y traída a España en un vuelo procedente de su país natal, con escala en Casablanca, en Marruecos. Tras someterla en su país a un rito de vudú como parte del compromiso para asegurarse el pago de los 50.000 euros por viajar a España.

Una vez aquí, primero en Valencia, y posteriormente trasladada a Tenerife, donde una mujer también nigeriana se encargaría de mantenerla encerrada y explotarla, la joven fue aleccionada para solicitar el asilo en España con una historia falsa, con el fin de dificultar su expulsión si la detenían por infringir la ley de Extranjería.

Desprovista de documentación fue explotada durante largas jornadas con indicaciones de la zona donde captar clientes y mantener relaciones sexuales, así como las tarifas que debía cobrar.

Al final del día, su explotadora recogía el dinero recaudado y la amenazaba con pegarle si algún día no hacía ningún servicio. Hasta que fue liberada por la Policía, la joven había pagado ya a la organización 30.000 euros. Después la detención de sus cinco explotadores y el análisis de los efectos incautados en los registros, los investigadores averiguaron que la red contaba con una segunda rama en Alcalá de Henares desde 2007.

En esta segunda fase, en Madrid, la policías nacionales detuvieron a dos personas y liberó a otra mujer de Sierra Leona que gozaba de condición de solicitante de asilo y que también había sido sometida a las mismas prácticas de vudú que la otra joven.

Las investigaciones permitieron a los agentes detener a un total de siete personas y realizar diferentes registros. El estudio en profundidad de todos los datos en la primera fase en Tenerife, permitió realizar y concluir la segunda.

La operación se enmarca dentro del plan policial contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual, iniciada en 2013 cuando se activó el teléfono 900 10 50 90 y el correo trata@policia.espara facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial, de este tipo de delitos.

En 2015 se recibieron 1.388 llamadas de las que 362 dieron lugar a investigaciones. Al correo llegaron 414 comunicaciones que originaron 128 investigaciones.