Internet le abrió la puerta de más de setenta colegios de toda España, donde aprovechaba no sólo para dar charlas, sino para contactar con menores. El valenciano Juan R. P., autor de El blog de Juanri, ingresó ayer en prisión por abusar presuntamente de un niño de 13 años. A través de su plataforma digital, en la que aparece en todas sus fotos rodeado de pequeños, realizaba actividades de pedofilia, pedarastia y distribución ilícita de pornografía infantil. El conocido bloguero podría enfrentarse a una pena superior a los 20 años.

El instructor del caso, que ha declarado el secreto de sumario, considera que hay indicios de entidad suficiente para ordenar la prisión sin fianza, teniendo en cuenta la gravedad de los hechos investigados. Considera, igualmente, que concurre riesgo de fuga y de reiteración de los hechos.

Por su parte, el delegado del Gobierno de la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Moragues, manifestó ayer jueves que el detenido no sólo tenía un blog, sino también un canal de Youtube, donde colgaba vídeos de cuentos infantiles o con alumnos de centros escolares de distintos puntos de España. En uno de los vídeos, grabado en 2011, se anunciaba que se habían grabado 160 vídeos. En concreto, tuvo acceso a colegios de Madrid, Alicante, Barcelona, Sevilla, Castellón, Zaragoza, Castilla y León, Galicia y Baleares, entre otros.

Este sospechoso fue detenido por agentes de la Unidad Especializada en redes sociales de la Guardia Civil en el marco de la denominada operación Balban, llevada a cabo para esclarecer posibles abusos sexuales a menores.

El pasado mes de mayo, los agentes tuvieron conocimiento de una denuncia donde se indicaba que una persona podría estar aprovechando su actividad laboral para realizar hechos ilícitos con menores.

De inmediato se inició un operativo que permitió la detención del hombre el pasado lunes, 6 de junio. Fuentes cercanas a la investigación aseguran que el detenido, además de almacenar pornografía infantil, era el encargado de producir el material pedófilo.

Los agentes realizaron un registro en el domicilio del detenido en Valencia, donde intervinieron material informático y fotográfico, además de dispositivos de almacenamiento.

Según las fuentes, estos elementos tecnológicos están pendientes de ser analizados por los agentes responsables de la investigación para determinar la posible existencia de más víctimas.