Los bomberos del parque de Miller Bajo sofocaron ayer un incendio que se originó en uno de los vestuarios de los campos de fútbol del barranco de La Ballena, que se encuentran abandonados después de que se suspendieran todos los partidos que allí se disputaban por deficiencias en el pavimento.
Las llamas se originaron sobre las nueve de la mañana en unas dependencias utilizadas por una mujer para vivir, según apuntaron fuentes municipales. Al llegar al lugar, los miembros del cuerpo de extinción de incendios se encontraron con grandes llamaradas que salían por los conductos de entrada de aire.
El fuego afectó a varios colchones que eran utilizados por una mujer para dormir, así como abundante ropa. En un primer momento se pensó que la persona que ahora habita este lugar podría encontrarse en el interior, aunque poco después se descartó esta posibilidad ya que había acudido a un centro de salud.
Los bomberos, que utilizaron unos 2.000 litros de agua, estuvieron durante algo más de una hora en los campos de fútbol para así extinguir el incendio, que no afectó al resto de dependencias que en la actualidad ocupan varias personas sin hogar.
El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo, apuntó durante un acto que en este espacio de la capital no existen proyectos porque el suelo impide utilizarlo para la práctica deportiva, aunque espera que el plan de cooperación municipal aporte alguna partida con el objetivo de habilitarlo para otros usos.
