Nuevos casos de violencia de género en Las Palmas de Gran Canaria. La Policía Local ha detenido a dos hombres durante la última semana como supuestos autores de una serie de agresiones a sus antiguas parejas sentimentales en el parque de Santa Catalina y en la calle Luis Morote. Ambos pasaron a disposición judicial para responder como posibles responsables de malos tratos.

El primero de los episodios de violencia en los que intervinieron los agentes de la Unidad de Distritos de la zona Puerto de la capital se produjo el martes en el parque de Santa Catalina. Según la Policía Local de la capital grancanaria, un varón de 26 años fue detenido "tras propinar varios empujones y golpes a su expareja en la parada de guaguas". Estos hechos fueron observados por varios transeúntes que se encontraban en su entorno.

Los agentes, según relatan, tuvieron que calmar al presunto autor de los golpes, antes de proceder a su detención.

Una situación similar se registró el jueves. Dos funcionarios que recorrían las calles de la zona Puerto fueron requeridos por una mujer de 23 años que, "llorando y en estado de ansiedad, relató cómo su pareja le acababa de propinar varios bofetones".

La denunciante dio a los policías una descripción del supuesto responsable del ataque, por lo que pudo ser descubierto poco después por otra unidad en la calle Luis Morote, donde procedieron a su detención.

La Policía Local se hizo cargo de prestar la asistencia necesaria a las víctimas y de su traslado hasta un centro sanitario, antes de acudir a la comisaría para presentar la correspondiente denuncia.

Los dos hombres detenidos fueron llevados a dependencias policiales, donde pasarán finalmente a disposición judicial.

A estos hechos se suma una situación similar acaecida la semana pasada en el mismo distrito de la capital. En ese caso, la Policía Nacional detuvo a un varón de 43 años con una orden de alejamiento que clavó un puñal en el cuello a su anterior pareja, antes de huir a la carrera por una céntrica calle de La Isleta. La mujer había perdido mucha sangre, aunque antes tuvo la ocasión de activar el dispositivo de alerta a mujeres maltratadas de su teléfono móvil. Los testigos relataron que el citado individuo se había presentado en este bar de La Isleta donde estaba su antigua compañera sentimental, inició una discusión y "profirió amenazas contra ella y contra su familia".