Un bebé resultó herido la noche del sábado en Orense tras arrollar un coche el carrito en el que se encontraba y del que salió despedido como consecuencia del impacto. Al recibir el golpe, el niño salió despedido y acabó cayendo al suelo.

El bebé fue trasladado a un centro sanitario por precaución, aunque las heridas sufridas aparentemente no revestían gravedad.

Una persona particular se puso en contacto con el 112 Galicia para solicitar asistencia sanitaria para el pequeño. Protección Civil y la Policía Local también se personaron en el lugar de los hechos.