La Guardia Civil del Puesto de Corralejo abrió una investigación al descubrir la presunta existencia de medios de caza de aves en el norte de la Isla que no son legales. Los agentes hallaron en Corralejo una trampa que consistía en una red ubicada en el suelo y posicionada en forma de libro y accionada manualmente mediante una cuerda desde un escondite a diez metros.