Santa Cruz sufrió esta madrugada uno de los peores ataques vandálicos de los últimos años, que según varios vecinos pudo haber provocado "una tragedia". Unos gamberros prendieron fuego a cuatro contenedores pasadas las 6:00 horas de este domingo en la calle de La Rosa, a la altura de la intersección con San Vicente Ferrer, en pleno barrio de El Toscal, y utilizaron líquido inflamable para que los daños fueron mayores.

Las llamas alcanzaron rápidamente tal intensidad que saltaron a una casa que se encuentra a un metro escaso de los contenedores. La fachada quedó calcinada y solo la rápida actuación de la Policía Local de Santa Cruz y del Consorcio de Bomberos evitó que el fuego se propagara por la terraza y los edificios aledaños. "Pudo haber sido una tragedia. Yo y otros vecinos nos levantamos asustados y vimos unos enormes llamas que destrozaban las casas y derretían algunos carteles de comercios. Menos mal que en la casa no estaba el dueño ni había nadie dentro. Era tal la temperatura y la humareda que no se podía estar asomado sino unos segundos", aseguró Antonio Mederos, un vecino de la zona.

La casa afectada había sido rehabilitada. Los daños sufridos por la acción de los gamberros superan los 20.000 euros, según las primeras hipótesis. La Policía Local ha abierto una investigación para ver si existe alguna prueba que pueda conducir a los causantes de este desastre. Mientras, los residentes de la calle de La Rosa exigieron al Ayuntamiento y los cuerpos de seguridad que acaben de una vez que estos ataques vandálicos. "Llega a ser una casa abandonada, llena de basura, como las que abundan en el barrio de El Toscal y estaríamos hablando a lo mejor de peores consecuencias. Esto no se puede permitir. Hay que coger a estos gamberros y que la paguen", coincidieron varios vecinos de El Toscal que examinaban, estupefactos, los daños del incendio.