El número de muertos en el incendio que arrasó el viernes un almacén en el que se celebraba un concierto en Oakland (EE UU) aumentó hasta 30, informaron ayer las autoridades. El sargento Ray Kelly, de la Oficina del Sheriff del condado de Alameda, confirmó la cifra, que describió como "astronómica", y advirtió, una vez más, de que el número de víctimas mortales se puede incrementar porque todavía hay personas desaparecidas.