Un avión Airbus A321-211 de la compañía charter británica Thomas Cook Airlines tuvo que desviarse ayer de su ruta hacia Londres, tras partir del aeropuerto de Espargos, en la isla de Sal, en Cabo Verde, al detectar el comandante de la aeronave que en la bodega del avión un bulto fue facturado sin que viajase con su acompañante. En Tenerife, el Tedax no encontró nada sospechoso.