Un joven de 15 años confesó ser el responsable del asesinato de dos personas en la escuela primaria de Wilds Minne, ubicada en la ciudad de Kristiansand, en el sur de Noruega. Las víctimas son un joven de 14 años, identificado como Jakob Abdullahi Hassan, estudiante noruego de origen somalí, y Tone Illebekk, una noruega de 48 años que trabajaba como cuidadora.

El joven reconoció su implicación en el asalto al ser interrogado por los agentes durante el martes por la noche. La policía asegura que no existen motivos para creer que esté mintiendo al ser la explicación de los hechos tan detallada.

El portavoz de la Policía, Terje Kaddeberg Skaar, informó de que no existen "pruebas concretas" de que "haya más de una persona" detrás del ataque. El joven fue trasladado a un centro de salud mental.

Los agentes describieron al detenido como parte del círculo social de Hassan, el joven asesinado, si bien no existe aún ninguna relación con Illebekk.

Las autoridades no han dado ninguna explicación al ataque. "El acusado dio una información que es detallada, pero no vamos a hacerla pública. Es importante para la Policía que esta información no se revele", señaló el portavoz.

Este trágico suceso fue motivo de conmoción y de estupor entre muchos vecinos de la citada ciudad de Kristiansand, así como en todo este país escandinavo. Muchos recordaron la matanza de menos 84 personas por parte de Anders Behring Breivik, que iba, vestido con un traje de policía y que comenzó a disparar en junio de 2011 contra los cientos de jóvenes que participaban en el campamento de Partido Laborista de Noruega en la isla de Utoya, en el lago de Tyrifjorden .