La Policía Local de Arona, con el apoyo de la Guardia Civil y de diversas protectoras de Tenerife, llevó a cabo, durante el día de ayer, un amplio operativo en una finca situada cerca de un barranco del municipio tinerfeño de Arona, en la calle Elvira, entre Valle de San Lorenzo y Cabo Blanco. Durante esta operación, que ahora se encuentra bajo secreto de sumario, se hallaron decenas de animales muertos, entre ellos perros, faisanes, gallinas, palomas y patos. Asimismo, pudieron ser rescatados con vida una treintena de perros y decenas de aves, aunque todos se encontraban en pésimas condiciones.

Los perros encontrados, todos ellos de la raza bardino, pudieron ser trasladados ayer mismo a varios puntos de la Isla, gracias a organizaciones como el Centro de Protección Animal Tierra Blanca y a diferentes voluntarios. La consejera de Podemos en el Cabildo de Tenerife, Milagros de la Rosa, quien se trasladó hasta este espacio de Arona durante la tarde de ayer, aseguró que "no se trata de perros potencialmente peligrosos, lo que facilita su colocación en diferentes entornos". De la Rosa añadió que "los animales estaban muy asustados y no tenían ni agua ni comida".

La consejera y diferentes testigos que se desplazaron hasta la nave ubicada en Los Toscales afirmaron que las "escenas eran dantescas" puesto que se encontraron a, al menos, una decena cadáveres de perros dispersos por toda la finca. Esta nave, convertida en una cochinera, contaba con diversas dependencias donde fueron encontrados los animales en un claro estado de abandono y rodeados de suciedad. Milagros de la Rosa indicó que "se pueden diferenciar a la perfección los cuartos de castigo y de reproducción, así como aquellos en los que dormían".

De este modo, la finca se encuentra llena de jaulas para animales que se encontraban en pésimas condiciones, sin comida ni agua. El fuerte olor del espacio se debe a la presencia de números excrementos, así como a la cercanía de una fosa a la que presuntamente tiraban a los perros para que murieran.

La mayoría de los cadáveres se concentran en uno de los hoyos de tierra al pie del barranco donde, aventuró la consejera de Podemos, "despeñaban a los animales tras las peleas". Los agentes no pudieron acceder en el día de ayer a este barranco y, por tanto, no se pudo calcular el número de animales fallecidos. No obstante, el Ayuntamiento de Arona enviará durante el día de hoy personal y maquinaria para retirar todos estos cadáveres y limpiar la zona para garantizar unas condiciones mínimas de higiene y salubridad.

El operativo dio comienzo durante la mañana de ayer con la presencia de agentes del Cuerpo Nacional de Policía, así como miembros de diferentes protectoras de animales, que llegaron alertados por la llamada de un vecino. Un inspector presente en la zona declaró que no podía dar más detalles pues el caso se encuentra bajo secreto de sumario. No obstante, una de las líneas de investigación que ahora se baraja se centra en que este caso esté relacionado con la red que fue desarticulada durante la madrugada del domingo, y en la que resultaron detenidas 21 personas. De este modo, se estudia la posibilidad de que presuntamente los detenidos acudieran a esta nave para hacerse con los perros que más tarde emplearían en las peleas ilegales. De todas maneras, las pesquisas siguen abiertas y no se descarta ninguna línea de investigación.

La consejera Milagros de la Rosa aseguró que, dadas las condiciones que se pudieron contemplar en esta propiedad de Arona, "se ve que esta situación se da desde hace bastante tiempo". Asimismo, la consejera no se explica "cómo es posible que estos animales viven en estas condiciones tan pésimas desde hace tanto tiempo si la nave se encuentra tan cerca de otras viviendas". De este modo, la consejera explicó que "pudimos hablar con algunos vecinos pero nos aseguraron que jamás han escuchado llantos de los animales ni les han llegado los malos olores".

Varias asociaciones protectoras de animales se desplazaron a Valle San Lorenzo durante la jornada de ayer para conocer el alcance de la operación policial e interesarse por la situación de los perros y las aves. Algunos pudieron entrar en la zona y rescatar a algunos de los animales. Tanto las asociaciones como los agentes de seguridad decidieron que las aves permanezcan en la finca durante los próximos días puesto que no ha sido posible encontrar un lugar al que desplazarlas. No obstante, se les ha dejado comida y agua y se precintó la zona para que nadie pueda acceder a ella y llevarse a los animales.