Un ciudadano español, identificado como Sergio Oliva, de Sevilla y de 38 años, ha sido detenido en Vaihaingen (suroeste de Alemania) por la muerte violenta de sus dos hijos, de 4 y 5 años. Oliva se ha negado a declarar y se encuentra hospitalizado por heridas que al parecer se infringió a sí mismo y bajo vigilancia policial. La muerte de los dos niños, Miguel y Leonardo, se produjo entre el viernes por la noche y el sábado por la tarde en la vivienda del español, que se había separado hace meses de su mujer, de 34 años y nacionalidad rusa. El hombre recogió el viernes por la tarde a sus dos hijos de la guardería, tal y como estaba acordado con su mujer, quien descubrió los cadáveres de ambos pasadas las 21.00 horas del sábado. Los menores presentaban "cuchilladas" y golpes en la cabeza.