El alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Agusto Hidalgo, aseguró que el ataque que se tradujo ayer en la muerte de Jhonatan Orozco Calderón no se produjo en el entorno de los actos del Carnaval que finalizó el pasado domingo con el Entierro de la Sardina "con un 5% menos de incidencias con respecto al año anterior". El regidor municipal comentó que, según la Policía Nacional, "la agresión tuvo lugar dentro de un centro comercial". Si bien los hechos se produjeron la madrugada del domingo, tras el último mogollón celebrado después de la Gran Cabalgata, en el parque Santa Catalina tal y como ha informado esta mañana el cuerpo de seguridad estatal a través de un comunicado.

El fallecido recibió una paliza por parte de otros dos individuos, uno español y otro italiano, que los agentes detuvieron pocos minutos después como presuntos autores del ataque y que fueron localizados gracias a la descripción de varios testigos. Asimismo, los policías asistieron a la víctima que se encontraba tirada en el suelo inconsciente y "con una herida en la cabeza que sangraba abundantemente". Orozco Calderón fue trasladado al hospital Doctor Negrín donde, después de recibir atención médica, fue dado de alta el domingo. Sin embargo, fue encontrado sin vida ayer por la mañana en el domicilio de Escaleritas de su tía donde había acudido a dormir. Ahora, los investigadores tratan de aclarar si la muerte está directamente relacionada con los golpes que sufrió el joven.