La Policía Nacional, en colaboración con la Guardia Urbana de Tarragona, ha desmantelado una red de explotación sexual, compuesta principalmente por ciudadanas de origen chino.

Los agentes detuvieron a tres personas e identificaron, en el piso utilizado para encuentros sexuales, a tres mujeres chinas y un suizo e incautaron documentación personal falsa.

Según la investigación, el hombre suizo y una de las mujeres chinas se encargaban de gestionar el negocio, tal como habían hecho ya en otras ciudades españolas.