Un guardia civil destinado en Arucas y que estaba fuera de servicio evitó que el pasado viernes un hombre siguieran agrediendo a su pareja, a la que presuntamente propinó un cachetón y después le empujó en la zona del Puerto. El agresor, al que se le imputa un maltrato de obra sin lesión, fue denunciado por la agredida después de que la Policía Nacional también hiciera acto de presencia en el lugar.

Los hechos ocurrieron sobre las diez y media de la mañana en las inmediaciones del centro comercial El Muelle cuando el funcionario vio cómo ambas personas se pusieron cara a cara mientras mantenían una discusión. En ese momento, el hombre le dio un bofetón, quedándose la agredida parada y encarándose posteriormente con él. Fue entonces cuando el guardia civil intercede y da a conocer a ambos que es agente. Mientras intentaba tranquilizar los ánimos de los dos implicados en la discusión, que tienen entre 35 y 40 años, dio aviso a una patrulla de la Policía Nacional que estaba en la zona, quienes se encargaron a partir de entonces del servicio.

En el acto también se produjo, presuntamente, un empujón por parte del denunciado a la mujer cuando estaba se encontraba en un banco. Ésta renunció a acudir a un centro médico para que valorara si tenía alguna lesión.

En el día de ayer se celebró un juicio rápido en el Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria.