Ocho personas resultaron heridas por el atropello de un automóvil en un incidente que se produjo muy cerca de la principal Estación Central de Amsterdam, sobre las nueve de la noche del sábado. El conductor fue detenido y la portavoz de la policía Marjolein Koek aseguró que no se trata de una acción terrorista, pese a las sospechas iniciales de que se podía tratar de un nuevo atentado.
La policía avisó a un conductor que estaba mal estacionado en una zona cercana a la estación y, según las primeras versiones, el hombre escapó del acoso policial y perdió el control hasta atropellar a un grupo de personas y chocar contra un muro. Seis de ellos -dos en estado grave- fueron trasladados al hospital, mientras que los dos restantes fueron atendidos en el mismo lugar de los hechos.
El cuerpo policial holandés, que confirmó que hay ocho heridos, realizó un corto comunicado a través de Twitter en el que aseguró que todo indica que no ha sido un accidente intencionado pero que se están investigando los hechos. Horas más tarde, llegó ya la confirmación oficial desde las autoridades holandesas que descartaba un atentado provocado.
