El exluchador británico Jim Breaks, de 80 años, reconoció en sede judicial que la noche del pasado jueves agredió a Donna Cowley, de 47, en el interior de un apartamento de Puerto Rico y que los enfrentamientos físicos eran relativamente frecuente entre ambos.

La víctima falleció horas después en el Hospital Insular debido, presuntamente, a la paliza que le propinó Breaks, con el que compartía domicilio pero que, según el agresor, no mantenían relación sentimental sino que ella se encargaba de cuidarlo debido a su longevidad. Las autoridades judiciales dudaron en un principio si tramitar el caso como violencia de género, aunque finalmente, dado los indicios, el juez especializado en este tipo de delitos se hizo con la causa y envió al octogenario a la prisión de Salto del Negro como presunto autor de un homicidio.

Y es que entre ambos existía una relación de afectividad. Los allegados incluso declararon al periódico The Sun que en algún momento ambos mantuvieron relaciones sentimentales, pero que en la actualidad no eran pareja. Breaks declaró que no era la primera vez que ocurría un discusión entre ambos, alegando a su vez que la víctima era corpulenta. Tras la pelea que tuvo lugar en la noche del pasado jueves al viernes, la víctima llamó a los servicios de emergencia asegurando que había sido agredida, aunque no lo relacionó con una caso de violencia de género, según informaron fuentes cercanas a la investigación.

Los agentes de la Policía Local fueron los primeros en personarse en el apartamento 608, propiedad del exluchador, del complejo Bahía Azul. Allí se encontraron al agresor confeso sentado en el sofá y viendo la tele, como si lo ocurrido no tuviera relación con él; y a la agredida, consciente, en el baño limpiándose la sangre provocada por los golpes que le había propinado su expareja. Los policías atendieron en un primer momento a la víctima y dieron aviso al Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112 para que movilizara una ambulancia de soporte vital básico. Asimismo, pusieron en conocimiento de los hechos a la Guardia Civil ante la existencia de un supuesto caso de violencia de género. Estos procedieron a la detención de Breaks, al que además le imputan un delito de atentado a la autoridad al resistirse de forma activa en los calabozos del cuartel de Arguineguín.

Donna Cowley fue evacuada en un inicio al centro de salud de Arguineguín y con posterioridad derivada al Hospital Insular de la capital grancanaria debido a la gravedad de sus heridas, que sin embargo, en un principio no parecían incompatibles con la vida. Horas después, fallecía cuando los médicos estaban realizándole pruebas para conocer su estado de salud.

Con este desenlace, el caso se convirtió en un homicidio y, en principio, está relacionado con un nueva víctima de violencia de género a la espera de que avance la investigación que dirige la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Comandancia de Las Palmas y el equipo territorial de la Policía Judicial de Arguineguín. Ni las fuerzas de seguridad ni tampoco el Ayuntamiento de Mogán tienen constancia alguna de denuncias previas por agresión.

La ministra de Sanidad, Dolor Montserrat, manifestó ayer a través de su cuenta personal de Twitter su "rotunda condena" ante el asesinato de esta ciudadana británica, según informó Efe. Montserrat, que también transmitió su pésame a la familia y amigos de la víctima, denunció así el asesinato, el número 32 en lo que va de año, la tercera que se produce en las Islas.

Sobre la vida del exluchador británico, éste llegó hace más de dos décadas a Gran Canaria después de su exitosa vida deportiva, en la que alcanzó más de una treintena de títulos nacionales e internacionales. La noticia llegó hasta su localidad natal, Bedford, al norte de Inglaterra, donde el periódico Telegraph & Argus recalcaba la conmoción que había supuesto para los amigos de Breaks su detención como autor de un presunto delito de homicidio. En la información se indicaba que el ahora apresado se ha casado en tres ocasiones.

Steven Tempest-Mitchell comentó que Jimmy, como le conocen, "era muy atlético, competitivo". Sobre su personalidad, Mitchell destacó que siempre tenía una sonrisa y le gustaba bromear. "Es un buen tipo" comentó. Por ese carácter afable con el que lo define, el suceso sorprendió aún más a aquellos que lo conocieron. En su cuenta de Facebook, esta misma persona comentó: "¡Todavía no me puedo creer esto! Muy triste para toda la familia. Los pensamientos están con Donna Cowley, la familia inmediata y con Jimmy, que es inocente hasta que se demuestre lo contrario...".

Sobre la víctima, los amigos indicaron a The Sun que llegó a la Isla junto a Jim Breaks hace más de dos décadas y que durante este tiempo había trabajado en algunos negocios de hostelería, tanto en el Sur como en la capital grancanaria. Y es que, el apresado apuntó que había dado trabajo a Cowley en un antiguo bar que regentaba. Algunas de sus amistades la recordaron en Facebook, como la usuaria Poppy Cooper, quien indicó que había conocido a la fallecida en el Pub Yates del Centro Comercial Europa de Puerto Rico. "Ella mantuvo una sonrisa" dijo, para después añadir: "Me siento profundamente dolida (...) Donna eres un ángel especial. Descansa en paz cariño".