"Sopla aquí". Estás son las palabras con las que respondió un motorista borracho, enseñando sus genitales, a agentes de la Policía Local de A Coruña cuando le estaban realizando un control de alcoholemia.

A consecuencia de esto, el hombre ha sido condenado a nueve meses de cárcel y 15 sin carné de conducir por el Juzgado de lo Penal número 5 de A Coruña.

El conductor, en vez de acatar la orden de la Policía, se dio a la fuga, iniciando así una persecución en la que no respetó los semáforos ni el límite de velocidad, en el que llegó a conducir a más de 100 kilómetros por hora. Sin embargo, debido a su estado, el motorista perdió el control y se cayó.

"Cuando esté libre, voy a por vosotros y os abro la cabeza", dijo el motorista tras saber que la Policía iba a someterle a un control de alcoholemia.

El individuo se negó a soplar varias veces hasta que, al ser advertido de que sería denunciado si continuaba con esa actitud, se bajó los pantalones, enseñó sus genitales y dijo: "Sopla aquí".

"También puede venir el juez a soplar aquí", respondió el hombre cuando los agentes le comunicaron que sería llevado al juzgado si continuaba faltándoles al respeto.Un mes después fue detenido de nuevo, borracho de nuevo y volviendo a enseñar los genitales, amenazándoles.