Un menor de 15 años, identificado como Raúl S. y vecino de Buen Lugar, falleció anoche en el barrio firguense de La Capellanía después de subirse a un torreón y sufrir una descarga eléctrica, que provocó que cayera desde unos diez metros de altura. Los equipos de emergencia acudieron al lugar de inmediato, pero nada pudieron hacer por salvar la vida al joven, que momentos antes se encontraba junto a otros cuatro amigos bañándose en un estanque situado a escasos metros de la estructura metálica.
El suceso ocurrió poco después de las nueve de la noche cuando el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112 recibió una alerta en la que se indicaba que un joven había sufrido una descarga eléctrica y se había precipitado de varios metros de altura desde un torreón de luz situado en el pasaje del Álamo y necesitaba asistencia sanitaria urgente.
El 112 movilizó de inmediato al médico y el enfermero del centro de salud de Firgas, así como a una ambulancia medicalizada, Policía Local y Guardia Civil. Los sanitarios trataron de reanimar al menor, primero con tareas de reanimación cardiopulmonares básicas y después avanzadas, aunque sin éxito, por lo que el facultativo certificó su defunción.
El alcalde de la Villa de Firgas, Manuel Báez, acudió al lugar junto al primer teniente de alcalde, Vicente Alexis Henríquez, para conocer in situ lo ocurrido. Báez mostró su pesar por el hecho luctuoso que tuvo lugar en el municipio y anunció la suspensión de la final y la entrega de trofeos del torneo de fútbol sala que se iba a disputar hoy en el polideportivo municipal, en el que el fallecido había participado durante estos días.
El regidor permaneció en el barrio de La Capellanía junto a los agentes de la Guardia Civil hasta última hora del día de ayer a la espera de que se personara el juez y ordenara el levantamiento del cadáver. El cuerpo estaba previsto que fuera trasladado anoche hasta el Instituto de Medicina Legal de Las Palmas de Gran Canaria, donde a lo largo del día de hoy se le realizará la correspondiente autopsia que determinará las causas del fallecimiento. Por su parte, los miembros del instituto armado del puesto de Arucas se encargaron de instruir las diligencias para esclarecer lo ocurrido.
Raúl S. pertenece a una familia muy conocida del barrio de Buen Lugar, situado entre el casco urbano de Firgas y Casablanca. En el momento del accidente se encontraba con un grupo de amigos con el que se solía estar, según apuntaron fuentes municipales.
Báez indicó que la noticia ha sido un fuerte golpe para este tranquilo municipio del norte de Gran Canaria, que cuenta con una población aproximada de 7.500 habitantes.
