La madrugada de un sábado de junio de 2007, A. H., un ciudadano de nacionalidad marroquí y de 32 años, presuntamente mató de una puñalada en el corazón al turista alemán Karl Heinz Thonningen, de 44 años, cuando intentaba robarle. Diez años después, la declaración de su expareja ha llevado a la Policía Nacional a resolver el caso, que se había enquistado después del arresto de un médico escocés -que finalmente quedó en libertad- como principal sospechoso del crimen. A. H. fue detenido el pasado fin de semana y desde el lunes duerme en prisión después de que el fiscal le acusara de un presunto delito de homicidio.

La excompañera, de origen canario, contó a los agentes los detalles de lo ocurrido aquel día. A. H. llegó a la vivienda que compartían en el sur de Gran Canaria con la ropa manchada de sangre y el cuchillo con el que cometió el crimen. Había acabado con la vida del germano, al que había sorprendido en la calle Timple de San Bartolomé de Tirajana para robarle pero en un momento, según declaró el ahora apresado en sede judicial, la víctima se abalanzó sobre él y le clavó el arma blanca en el corazón. Después huyó del lugar y contó lo sucedido a su pareja. De inmediato se deshizo de todas las pruebas que le relacionaba con el crimen, quemando las prendas y tirando el arma blanca a una papelera.

Los investigadores, sólo 36 horas después del homicidio, detuvieron al que creían que era el principal sospechoso, un médico escocés de 39 años de edad e identificado como Colin Brown. El móvil del crimen, según las diligencias remitidas al juez, fue un fuerte arrebato pasional. Ambos se habían conocido la noche anterior y el británico supo después que la víctima tenía pareja sentimental.

Brown, en su declaración ante la autoridad judicial, afirmó que no conocía de nada a Karl Heinz Thonningen y se desmarcó de lo ocurrido. El juez no dio credibilidad a su declaración y ordenó su ingreso en prisión provisional como supuesto autor del homicidio.

El curso de la investigación dio un giro cuando la autoridad judicial ordenó poner en libertad al médico escocés semanas después del suceso, aunque con una orden de permanecer en el país hasta que se esclareciera el caso. Sin embargo, las pesquisas no avanzaron y finalmente se archivó al no haber indicios sobre quién había acabado con la vida Heinz Thonningen.

El Juzgado de Instrucción número 2 de San Bartolomé de Tirajana reactivó a finales de la semana pasada la investigación cuando, según las fuentes consultadas, la exnovia de A. H. denunció que éste había matado a un alemán en 2007 en el sur de Gran Canaria. La denunciante incluía cortes de audio en los que se acreditaba que el marroquí es el autor del homicidio. A ello se unía la declaración cronológica de lo que había ocurrido aquel día. La expareja aseguró que por miedo no había puesto los hechos en conocimiento de la autoridad. Con estos indicios, la Policía Nacional procedió a la detención de A. H. como presunto autor del homicidio sucedido hace una década. El juez en funciones de guardia ordenó el pasado lunes su ingreso en prisión.