La Justicia desalojó este sábado a tres 'okupas' que residían desde principios de año en un inmueble en la zona del Cuadrilátero, que estaban haciéndoles la vida imposible a los vecinos de las 16 viviendas de este edificio situado en la calle María del Cristo Osuna, en La Laguna (Tenerife). Los residentes de este inmueble habían denunciado la situación, ya que los tres varones eran conflictivos y sospechaban que se dedicaban a la venta de droga.

Poco antes de las 11.00 de la mañana llegó a este inmueble la Comisión judicial acompañada por dos agentes de la Policía Nacional y un vehículo del servicio de limpieza del Ayuntamiento de La Laguna para retirar del piso los enseres que estuvieran en mal estado. Los tres 'okupas' no opusieron resistencia y pocos minutos después salieron del inmueble portando varias maletas y depositaron en el furgón dos colchones muy deteriorados.

Los vecinos hicieron pública la presencia de 'okupas' en el edificio el pasado mes de septiembre asegurando que la situación estaba acabando con la paciencia de muchos inquilinos y propietarios. Ruidos, malos olores y destrozos son solo algunas de las cosas que tuvieron que soportar durante los más de ocho meses que residieron en este piso de La Laguna. Los 'okupas' tenían que trepar por la fachada del inmueble para acceder a la vivienda, ya que no tenían la llave del portal del edificio. Además, los vecinos intuían que se dedicaban a trapichear.

El supuesto cabecilla de este grupo, A. B. de 22 años, llegó en patera a la Isla procedente de Marruecos, y fue detenido el pasado mes de julio después de que presuntamente le propinara una paliza a un joven en el Cuadrilátero. La víctima ingresó en el Hospital Universitario de Canarias (HUC) debido a una fractura abierta en una pierna y también por varios golpes.

Este 'okupa' ha sido detenido en otras ocasiones por hurto y los agentes han levantado también varias actas por tenencia de cocaína y porque portaba un arma blanca, ya que en una de ellas llevaba un cuchillo jamonero.Las fuentes policiales consultadas señalaron que junto a él actúan otros tres marroquíes, acompañados por un joven del barrio de San Honorato.

La Justicia ha tardado casi un año en poder desalojar esta vivienda. La primera denuncia se interpuso el 5 de abril y el primer juicio se celebró el 13 de junio. Hubo una segunda vista el 25 de julio y aunque el abogado del propietario pidió que se ejecutara la sentencia, la abogada de oficio de los 'okupas' interpuso un recurso, por lo que el desahucio se retrasó hasta este sábado.