Un nuevo ejemplar de cisne negro salvaje fue atrapado ayer domingo en la playa de La Aldea de San Nicolás, en la zona de La Caletilla, frente al muelle, por parte de un bañista y Bomberos del Consorcio de Emergencias, del parque de La Aldea. También otros bañistas colaboraron en la retención del ave. Es el tercero que aparece y se coge durante esta primera semana del mes de noviembre en las costas de Gran Canaria. De momento, se desconoce la procedencia.

En el caso de ayer, los Bomberos del Consorcio fueron alertados pocos minutos antes de las cuatro de la tarde. Ya en el lugar, los bomberos y bañistas rodearon al cisne que estaba en el agua, se resistía a ser agarrado y se mostró cansado.

Al parecer, había sido localizado antes en Agaete, donde fue perseguido incluso mediante motos de agua, pero se le perdió el rastro.

En La Aldea, en la zona de La Caletilla, los perseguidores lograron que el ave saliera del agua, y lo atraparon en la orilla un bañista italiano y el cabo de los bomberos.

Según fuentes próximas al caso, el cisne no tenía anillo, ni el vuelo cortado (una técnica de corte que impide volar). Después fue examinado por una veterinaria y entregado después al personal de Medio Ambiente del Cabildo.

El primer cisne fue descubierto el miércoles en la playa de Melenara, en el municipio de Telde. Varios bañistas lo atraparon y alertaron al centro de Recuperación de Fauna Silvestre, de Tafira, del Cabildo.

El segundo ejemplar se descubrió el pasado viernes en las inmediaciones del castillo de San Cristóbal, en Las Palmas de Gran Canaria. Fue atrapado por bañistas y vecinos y dado a Medio Ambiente.