La carretera GC-605 que une Mogán con Ayacata está cerrada desde la tarde de ayer. Un desprendimiento de rocas entre Albarianes y El Mulato obligó al servicio de carreteras del Cabildo a proceder a su corte, que se mantiene hasta, previsiblemente, hoy, cuando está previsto que la maquinaria de la institución insular retire las piedras de grandes dimensiones.

El incidente ocurrió poco después del mediodía de ayer cuando los propios usuarios de la vía, en su mayoría turistas y ciclistas aunque también vecinos del sur y centro de la Isla, dieron la voz de alarma al toparse con un desprendimiento de enormes rocas sobre el asfalto que les impedía seguir el trayecto.

El Cabildo de Gran Canaria decidió posponer la retirada de las piedras hasta hoy debido a que la proximidad de la ocaso, que impedía realizar los trabajos con total garantía antes de que se hiciera la noche. Así, se espera que a primera hora de un una retroexcavadora proceda a liberar la calzada y que el servicio de carreteras se encargue de su limpieza antes de su reapertura, según anunció la institución insular.

El tramo de carretera que se encuentra cortada es el que va desde el cruce con la GC-200, que conecta Mogán con La Aldea, a la intersección con el camino que une la GC-605 con Barranquillo Andrés. Así, aquellos que esta mañana quieran dirigirse a la Cumbre desde Mogán tendrán que utilizar la GC-505, que va desde el sur hasta Barranquillo Andrés y ahí alcanzar la GC-605; la carretera de Fataga (GC-60) o la de Las Presas (GC-210) por La Aldea.

Sin embargo, la situación en las carreteras del centro de la Isla podría empeorar durante la jornada de hoy debido a las inclemencias meteorológicas. Y es que se prevé que los vientos puedan alcanzar rachas de hasta 110 kilómetros por hora, con chubascos que pueden llegar a ser fuertes e incluso la posibilidad de presencia de nieve en cotas superiores a los 1.700 metros sobre el nivel del mar, que afectarían a carreteras como la GC-130 (Los Llanos de la Pez - Telde) o la GC-134 del Pico de las Nieves.